Se acabó.

domingo, 15 de junio de 2008

Tengo que decir que tomar decisiones no es mi fuerte. Me demoro muy poco en darme cuenta de cuál es el camino que tengo que tomar, pero pasan muchas cosas antes de que realmente haga lo que tengo que hacer.
Ahora, si ponemos esta situación en el plano amoroso, soy una mierda de mujer, soy una arrastrada. Porque sé desde el momento justo, cuándo debería de correrme, salir del lugar, esconder la cabeza y dejar que todo termine. Pero no lo hago, y sigo buscando y buscando, sigo siendo rechazada múltiples veces de distintas formas. Hasta que tarde o temprano llego al punto en el que estoy ahora.
Aunque a decir verdad, no es que antes del momento en el que estoy ahora haya realmente tenido que tomar una decisión. Siempre es la otra persona la que toma por mi; me dejan, me patean, me botan o como ustedes quieran decirle. Yo decido olvidar cuando encuentro un reemplazo. En el fondo, es cuando cambio un amor por otro, una clavo saca otro clavo y todos esos cuentos. Pero antes de eso, rayo la papa y peino la muñeca todo el rato, en otras palabras, me arrastro y me ilusiono de una manera 100% masoquista.
Pero llegó el momento en el que de verdad tengo que salirme. No solo por un tema de orgullo, para no tener que seguir buscando las migajas rancias que me dan, sino de que han sido tantos los "rechazos" que ya no hay "magia", ya no espero nada.
Este tipejo, Andrés. Ya de verdad me tiene enferma. Yo les digo, me encanta. Me fascina a otro nivel, en serio. Es inteligente, simpático, muy culto, interesante, MINISIMO, es de verdad el hombre perfecto. Pero su problema inicial fue el miedo al compromiso y por ahí fue que nos fuimos desgastando. Filo, la cosa es que terminamos. Y yo, como siempre, me quedé marcando ocupado esperando a que en algún momento él se girara un poco y me viera esperando. La cosa es que lo que yo esperaba sucedió a medias. No realmente porque él necesitara estar conmigo, sino porque me necesita, sí, pero de una forma distinta. Me requería (para no decir "me quería") para apoyarse en mi porque su vida, de un día para otro, se volvió miserable. Entonces me buscó, me invitó a hacer cosas, etc. Nunca como pareja, sino como alguien que podía comprenderlo y ayudarlo. Y obviamente ahí estuve yo. Todo lindo hasta ese momento.
Pero resulta que quedamos de juntarnos hoy. Un poco porque yo me colé a su junta con su mejor amigo para hablar de esta "decadencia" que lo había tomado por sorpresa. La cosa es que lo llamo a las 11 para decirle que voy saliendo. Me dice que me llama más o menos en una hora porque estaban, él y su amigo, en la casa de unos amigos. Más o menos una hora después me manda un mensaje para avisarme que se atrasarían y que me llamarían más tarde. Yo les respondí que se relajaran, pero que me avisaran cualquier cosa. ¡Menos mal que salí de mi casa y me junté con unos amigos! Porque este jetón no me llamó nunca más. Ahora son las 4 20 de la mañana y no he recibido ni confirmación ni cancelación del asunto.
Yo entiendo que él es un volado. Que a veces no se quiere juntar, que le gusta su mundo, su libertad de acción, vivir a su manera. Pero, imaginense que yo me hubiera quedad maquillada y arreglada para él! O sea, un mínimo de respeto!
Entonces, de verdad, esto es lo último que puedo aguantar. Desde ahora en adelante, Andrés no es más que un mino al que podría haber querido mucho. Desde ahora en adelante, que se las arregle sin mi. Si necesita un consejo, un hombro en el cuál llorar, que llame a su mamá. A mí, maní!
Y de verdad que me molesta caleta tomar esta decisión, porque me encanta a otro nivel,pero es que ¡weón! hay un límite. Y yo de verdad soy una mina bacán, tanto como polola como amiga, y no me merezco en ningún caso un trato como este. De solo pensar en lo deprimida y maltratada que me sentiría si es que me hubiera quedado en mi casa, sentada en mi pieza viendo televisión, con el celular en la mano esperando a que me llamara, para finalmente tener que acostarme vacía de ilusiones, sin siquiera haber recibido un puto mensaje que me dijera que se le había pasado la hora, me hace de verdad mandar a la mierda todo. A él, a yo con él, a nosotros. Es que...¡Que le corten la cabeza!
Y esa es mi sentencia final. Yo tengo mucho que entregar, pero a quien esté dispuesto a recibir (y por lo tanto a agradecer).
Además, si le sumamos a todo esto el hecho de que mis amigos me miraban con un poco de lástima porque yo estaba ahí supuestamente de pasadita no más, porque después me iba a juntar con quién ellos sabían era mi ex, entonces de verdad me veo mucho más patética de lo que puedan creer: Me plantó un mino que ya me había rechazado y al cuál yo seguía dándole oportunidades.

¡Que le corten la cabeza!
Esa es mi sentencia final.





Para decorar esta situación, los dejo con Deceptacon, canción de le tigre que habla un poco del desilucionarse de alguien. La escucho y grito: " I'm out of time, I'm out of fucking time!!"

4 comentarios:

Osvaldo Murti dijo...

Es curioso.
Leer esta historia me recordó algunos pasajes de mi propia historia, hace años atrás, así que no puedo comentar nada muy impersonal. Ahora, claro, yo viví el otro lado de la historia... no sé si me entiendes: no soy mujer... y siempre he tenido algún placer por la libertad, como tu lo mencionas, así que te imaginarás desde dónde estoy mirando tu escrito.
Es delicado lo que planteas en tus líneas. Me atrevería a decir que es frágil la proyección en el futuro cuando esa proyección se estructura con deseos y expectativas, sueños de princesa, más que en una construcción real, la construcción pausada y tranquila de una relación de conocimiento mutuo y cuidado por el otro, de manera recíproca. Y por qué me atrevo a decir eso?, porque he visto varias veces cómo son esas expectativas o las que construyen castillos en el aire o las que minan las posibilidades de relaciones concretas, positivas y útiles.
Entiendo que el romanticismo es dulce, como fantasía. Pero hace amarga la realidad y enturbia muchas veces la dulzura del contacto real, de la mirada real. De la sonrisa real una vez que abrazas a alguien que realmente quieres, quien realmente aprecias.
...
"Que le corten la cabeza"... uff, buen final, supongo, para esta historia. No pierdas la tuya por ningún hombre, no valemos tal costo.
Un saludo de inicio de blog.
Ojalá tus letras toquen otros colores.

Andrés Cea dijo...

Hola Elisita... primero disculpa la patudez de un visitante desconocido, que llega acá linkeando desde Kharma.

y segundo: también me dio la impresión como de princesita, como dice Kharma... pero me centré más en la interesante manera de resolver el tema... "que le corten la cabeza!!!" como dice la reina de corazones, pero acá dicho por la mismísima Alicia en un intento de aprender de su extraño viaje.

y eso de castillos en el aire... no creo que alguien humano alguna vez en al vida pueda establecer vínculos sin centrarse en las fantasías (sean fantasías lindas o catastróficas, siempre estar en pareja para mi implica fantasía, sino ... que fome )

en fin, distintas visiones, lo´único claro de todo esto es que bieeeen patevaca el tipo, dejarte plantada y ni un telefonazo si quiera. Por ultimo que pinche si no tiene plata. Feo. Me sumo: QUE LE CORTEN LA CABEZA!!!

Saludos
=)

Sierra dijo...

Del lado de acá, de otros lados en los días buenos y del lado de allá en un futuro que planeo lo más cercano posible.

Y Vd.?

Chissock dijo...

Gracias por el comentario; se hace lo que se puede para tratar de no caer en el snobismo =)

Respecto a lo que escribiste... bueno, cuesta a veces dejar ir ese tipo de cosas, sobretodo siendo una buena persona y tratar de "estar ahí"

suerte con tu resolución ;)